El Señor al que ama disciplina

Estudio Bíblico

Autor

Teólogo: Cruz Monasterio

Estudio Bíblico

Tema: El Señor al que ama disciplina

Texto: "Porque el Señor al que ama castiga, y azota a todo el que recibe por hijo." (Heb. 12:6).

Introducción

Nosotros también tenemos un Padre que nos ama pero que también nos corrige y nos disciplina, nuestro Padre no es como los padres de la sociedad de hoy, nuestro Padre no falla en disciplinarnos, cuando caemos en el pecado, y no obedecemos, viene la disciplina de Dios sobre nosotros.

Unos de los grandes problemas que hoy presenta la humanidad, es la responsabilidad de los padres de enseñar, corregir y disciplinar a los hijos. Hoy la sociedad ha cambiado algunas características de las responsabilidades de los padres ante los hijos.

Específicamente en la corrección y disciplina, los padres ya no cumplen esta responsabilidad eficientemente. De hecho las leyes, han establecido pautas y restricciones a los padres hasta dónde pueden corregir y disciplinar a sus hijos.

También los padres por falta de tiempo, por muchas ocupaciones o por pereza prefieren permitirles a los hijos actitudes y comportamientos que son muy cuestionables y hasta moralmente mal vistos por los mismos hombres. Los padres no entienden, que disciplinando a sus hijos le están manifestando y demostrando amor.

División

¿Que es Disciplina?: Es Educar, instruir, enseñar. Corregir Castigar, azotar. Entonces, Dios nos corrige, nos castiga.

El tema referente al castigo que El Señor algunas veces se ve forzado a aplicar cuando como hijos desechamos sus consejos y advertencias debido a que nos aferramos a la rebelión y la obstinación en abierta oposición a Su Palabra. Como vemos, el castigo es un método real de Dios para hacerse entender y obedecer por sus hijos descarriados.

El castigo humilla al soberbio y lo re encamina en pos de la verdad

Salmo cap. 119 versos 67-71-75, “Antes que fuera yo humillado, descarriado andaba; mas ahora guardo tu palabra. Bueno me es haber sido humillado, para que aprenda tus estatutos. Conozco, oh Jehová, que tus juicios son justos, y que conforme a tu fidelidad me afligiste.”

El castigo es un medio por el cual, Dios nos confronta y a su vez evita tener que condenarnos eternamente. En todo caso, es mejor ser castigados que condenados.

La carrera del cristiano

Además, habéis olvidado la exhortación que como a hijos se os dirige: HIJO MIO, NO TENGAS EN POCO LA DISCIPLINA DEL SEÑOR, NI TE DESANIMES AL SER REPRENDIDO POR EL; Porque el Señor al que ama, disciplina, a todo el que recibe por hijo. Es para vuestra corrección que sufrís; Dios os trata como a hijos; porque ¿qué hijo hay a quien su padre no discipline?

1 Corintios cap. 11 versos 30-31-32, “Por lo cual hay muchos enfermos y debilitados entre vosotros, y muchos duermen. Si, pues, nos examinásemos a nosotros mismos, no seríamos juzgados; más siendo juzgados, somos castigados por el Señor, para que no seamos condenados con el mundo.”

Pero tampoco pensemos que al Eterno Rey le agrada estar castigando a los Suyos, No, de ninguna manera. Leamos lo que escribió el profeta Joel cap. 2 versos 12-13, “Por eso pues, ahora, dice Jehová, convertíos a mí con todo vuestro corazón, con ayuno y lloro y lamento. Rasgad vuestro corazón, y no vuestros vestidos, y convertíos a Jehová vuestro Dios; porque misericordioso es y clemente, tardo para la ira y grande en misericordia, y que se duele del castigo.”

Un padre disciplina a su hijo, no por maldad, sino porque quiere que sea un hombre o mujer de bien, que tenga costumbres y comportamientos moralmente buenos. El padre no quiere que su hijo sea drogadicto, fornicario o mujeriego, borracho, asesino, ladrón, mal vecino, mala gente, por ello lo disciplina. Si no lo hace, pues está tratando a su hijo como si no le importará, como si fuera un bastardo. Para Dios no somos bastardos, sino hijos por ello nos disciplina.

"Hijo mío, no rechaces la disciplina del Señor ni aborrezcas su reprensión." (Pro. 3:11).

"Porque Jehová al que ama castiga, Como el padre al hijo a quien quiere." (Pro. 3:12).

Por tanto, debes comprender en tu corazón que el Señor tu Dios te estaba disciplinando así como un hombre disciplina a su hijo." (Deut. 8:5).

"Bienaventurado el hombre a quien corriges, Señor, y lo instruyes en tu ley." (Sal. 94:12).

`Yo reprendo y disciplino a todos los que amo; sé, pues, celoso y arrepiéntete." (Ap. 3:19).

Conclusión

Dios no quiere aquellos que han obedecido el evangelio se pierdan, sean condenados eternamente.

Dios quiere que disfrutemos de la comunión con Él, que obtengamos la vida eterna, que participemos de su santidad. Hebreos 12:10 Hebreos 12:14 1 Corintios 11:31-32.

He aquí, bienaventurado es el hombre a quien Dios castiga;
Por tanto, no menosprecies la corrección del Todopoderoso." (Job. 5:17).

Dios nos ama y nos cuida pero es necesario ser obedientes

Dios es amor, pero también severo, no caigamos en las manos del Dios vivo y no esperemos llegar hasta que Él nos discipline y nos castigue. Más bien enderecemos nuestros pasos, nuestra vida y vivamos agradando a Dios en todo. "¿Cuánto mayor castigo pensáis que merecerá el que pisoteare al Hijo de Dios, y tuviere por inmunda la sangre del pacto en la cual fue santificado, e hiciere afrenta al Espíritu de gracia? Pues conocemos al que dijo: Mía es la venganza, yo daré el pago, dice el Señor. Y otra vez: El Señor juzgará a su pueblo.!!Horrenda cosa es caer en manos del Dios vivo!" (Heb. 10:29-31).

Les solicito amablemente que por favor difundan masivamente estas enseñanzas en sus redes sociales porque están trayendo bendición a miles de almas sedientas de Dios y necesitadas de una palabra directa del Señor en sus vidas. Bendiciones.