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Estudio Bíblico
El
Egoísmo según la Biblia
“El Egoísmo y la venganza
solo pueden hacer Nido en un corazón vacío; Sirvamos a Dios sin egoísmos. No
oremos como lo hizo este Egoísta: Dios olvida a los niños que mueren de hambre
en el continente Africano; y haz que aumenten las ventas en mi negocio mañana,
eso sí es importante. Amen.” ¿Somos cristianos o Egoístas?
Autor
Teólogo: Cruz Monasterio
Estudio
Bíblico
Tema: El Egoísmo según la Biblia
Texto: “Al necio no le
complace el discernimiento;
tan sólo hace alarde de su propia opinión.” (Pro. 18:2).
tan sólo hace alarde de su propia opinión.” (Pro. 18:2).
Introducción
El egoísmo es una
actitud que se opone al amor al prójimo, predicado por la fe cristiana. A este
respecto, en el texto bíblico se señala: “Nada hagáis por egoísmo o por
vanagloria, sino que con actitud humilde cada uno de vosotros considere al otro
como más importante que a sí mismo, no buscando cada uno sus propios intereses,
sino más bien los intereses de los demás” (Fil.
2:3-4).
El egoísmo según el diccionario significa, amor excesivo por uno mismo
que nos hace atender desmedidamente aquello que es de nuestro interés sin
ocuparnos por los demás.
Esto provoca muchas
veces que nos coronemos como los Reyes de la autosatisfacción, un calificativo
que en esta era postmoderna en que prima el individualismo narcisista, puede
ser aplicado a muchos cuyo lema es: “lo mío primero”.
Cuando miramos a
nuestro alrededor y constatamos el micro mundo que muchas personas se han construido,
nos damos perfecta cuenta de la mezquindad y orfandad espiritual, a las que el
enemigo de las almas ha arrastrado al género humano, de la que no escapan
muchos que se autodenominan “cristianos”, pero que viven para satisfacerse sin
importarle lo que acontece en su entorno.
División
Esto ha sido la
causa de que para muchos miembros de la iglesia no sean otra cosa que
números que prestan sus glúteos a los bancos de nuestros templos, que escuchan las
predicaciones, diezman y ofrendan.
Muchas veces con
nuestros actos olvidamos que Cristo ocupó el lugar que nos pertenecía, y en su
deseo de redimirnos murió en nuestro lugar para darnos vida eterna; por tanto,
lo que nos toca ahora es vivir, agradando a Dios antes que a nosotros mismos y
darle la primacía de todo.
No entender que en
nuestro bregar cristiano la mejor manera de ganar es perdiendo, es lo que hoy
está arrastrando a los llamados “cristianos” a ingresar en el ejército de los
egoístas, lo que constituye la razón principal por la cual se pierde el maquillaje con el que se pretende engañar a Dios.
Permítame
decirle, lo que dijera el connotado maestro chino "Confusio": “Se puede engañar a una persona todo el tiempo, a muchas personas por un
tiempo, pero no se puede engañar a todo el mundo todo el tiempo.” La Palabra
nos enseña en el libro de Gálatas cap. 6 verso 7, “No os dejéis engañar, de Dios nadie se burla; pues todo lo que
el hombre sembraré eso mismo segará.”
¿Eres el
centro de tu vida o tienes en primer lugar a Dios? Si nos consideramos en deuda con Dios (como lo
estamos), sabremos tener en cuenta a Dios en nuestras prioridades, y viviremos
más en obediencia a Él para agradarle.
“Pero cuantas cosas
eran para mí ganancia, las he estimado como pérdida por amor de Cristo. Y
ciertamente, aun estimo todas las cosas como pérdida por la excelencia del
conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por amor del cual lo he perdido todo, y
lo tengo por basura, para ganar a Cristo.” (Fil.
3:7-8).
Lean esta
cita Bíblica y luego hablamos dice el Señor Dios todopoderoso: “Y por todos murió, para
que los que viven, ya no vivan para sí, sino para aquel que murió y resucitó
por ellos.” (2 Cor. 5:15).
Ejemplo
nos dejó el Señor al rescatar a un perseguidor de la iglesia primitiva, a Saulo
de Tarso quien sirviendo a su Señor exclamo. “¡Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no
vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la
fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí!” (Gal. 2:20).
Subdivisión
¿Cómo, ustedes creen que se sintió el Señor con el Egoísmo
Insensato de esta mujer, madre de dos de sus discípulos?
“Y Él le dijo: ¿Qué deseas? Ella le dijo: Ordena que en tu
reino estos dos hijos míos se sienten uno a tu derecha y el otro a tu
izquierda.” (Mat. 20:21).
Sientan la vergüenza que tiene
el Señor Dios Todopoderoso por haber creado al Género Humano: “¡Oh, {si hubiera} entre
vosotros quien cerrara las puertas para que no encendierais mi altar en vano!
No me complazco en vosotros dice el Señor de los ejércitos ni de vuestra mano
aceptaré ofrenda.” (Mal. 1:10).
El
señor sigue manifestando su descontento con el hombre: “Sus jefes juzgan por soborno, sus sacerdotes enseñan por
precio, sus profetas adivinan por dinero, y se apoyan en el Señor, diciendo: ¿No
está el Señor en medio de nosotros? No vendrá sobre nosotros mal alguno.” (Mig. 3:11).
Conclusión
Es mi deseo que
hagas morir toda conducta egoísta, y te centres en satisfacer las demandas de
Dios en todo tu ser y tu quehacer.
“Porque donde hay envidias y rivalidades, también
hay confusión y toda clase de acciones malvadas.” (Stg 3:16).
Porque los hombres serán amadores de sí mismos, avaros,
jactanciosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos,
irreverentes. (2 Tim. 3:2).
Así que, nosotros los que somos fuertes, debemos sobrellevar
las flaquezas de los débiles y no agradarnos a nosotros mismos. (Rom. 15:1).
Así como también yo {procuro} agradar
a todos en todo, no buscando mi propio beneficio, sino el de muchos, para que
sean salvos. (1 Cor. 10:33).
Porque todos buscan sus propios
intereses, no los de Cristo Jesús. (Fil.
2:21).
