Estudio Bíblico
La Sed que el cristiano debe sentir por las almas
Autore
Teólogo: Cruz Monasterio Ing. Jonás Duerto
Estudio
Bíblico
Tema: La
Sed que el cristiano debe sentir por las almas
Texto: " Mas a quien guarde mis mandamientos concederé los misterios de mi reino, y serán en el un manantial de aguas vivas que brota para vida eterna. Así como el agua es esencial para sostener la vida terrenal, el Salvador y sus enseñanzas (aguas vivas) son esenciales para vida eterna. "El que bebiere del agua que yo le daré, no tendrá sed jamas." (Jn. 4:6-15).
Introducción
"Al vivir el evangelio de Jesucristo, desarrollamos en nuestro interior una fuente viviente que satisfará eternamente nuestra sed de felicidad, de paz y de vida eterna."
Misericordia gratuita para todos
A todos los sedientos: Venid a las aguas; y los que no tienen dinero, venid, comprad y comed. Venid, comprad sin dinero y sin precio, vino y leche.
¿Por qué gastáis el dinero en lo que no es pan, y vuestro trabajo en lo que no sacia? Oídme atentamente, y comed del bien, y se deleitará vuestra alma con grosura. Inclinad vuestro oído, y venid a mí; oíd, y vivirá vuestra alma; y haré con vosotros pacto eterno, las misericordias firmes a David. He aquí que yo lo di por testigo a los pueblos, por jefe y por maestro a las naciones. He aquí, llamarás a gente que no conociste, y gentes que no te conocieron correrán a ti, por causa de Jehová tu Dios, y del Santo de Israel que te ha honrado. Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cercano. Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar. Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos.
División
En el comienzo de Su ministerio terrenal, el Salvador y Sus discípulos pasaron por Samaria, mientras viajaban desde Judea a Galilea. Cansados, con hambre y sed, debido a la jornada, se detuvieron en el pozo de Jacob, en la ciudad de Sicar. Mientras los discípulos iban en busca de comida, el Salvador se quedó cerca del pozo; al ver a una samaritana que había ido a sacar agua, le pidió de beber. Debido al rencor que existía entre judíos y samaritanos y al hecho de que no se hablaban con mucha frecuencia, la mujer respondió a la petición del Salvador con una pregunta: “… ¿Cómo tu, siendo judío, me pides a mi de beber, que soy mujer samaritana? …” (Jn. 4:9).
Comentario Teológico Bíblico. Cuando leemos en el Nuevo Testamento, la conversación del Salvador con la mujer Samaritana y como se valió de aquel simple encuentro en el pozo de Jacob para enseñar verdades poderosas y eternas. A pesar de su cansancio y sed, el Maestro aprovechó aquella oportunidad para testificar en cuanto a Su misión divina como el Redentor del mundo y para proclamar con autoridad Su verdadera identidad como el Mesías prometido. Con paciencia y consideración le respondió a la mujer: Si conocieras el don de Dios, y quien es el que te dice: Dame de beber; tu le pedirías, y el te daría agua viva” (Jn. 4:10).
Intrigada y dudosa, y al ver que Jesús no llevaba recipiente para el agua, la mujer volvió a preguntar: “… ¿De dónde, pues, tienes el agua viva?” (Jn. 4:11). En una extraordinaria promesa, el Señor entonces declaró ser la fuente de agua viva, el manantial de vida eterna, diciéndole: Cualquiera que bebiere de esta agua, volverá a tener sed; mas el que bebiere del agua que yo le daré, no tendrá sed jamas; sino que el agua que yo le daré será en él una fuente de agua que salte para vida eterna. (Jn. 4:13-14).
Sin comprender en absoluto el significado espiritual del mensaje del Señor, la mujer, que pensaba solamente en satisfacer la sed física y su propia conveniencia, le exigió: “… Señor, dame esa agua, para que no tenga yo sed, ni venga aquí a sacarla” (Jn. 4:15).
Al analizar la conversación entre el Salvador y esa mujer podemos contemplar el amor que el sentía por las almas perdidas porque no le importo ni el odio, ni las constantes enemistades entre judíos y samaritanos.
Cuando la mujer contestó que sabia que el Mesías habría de venir, Jesús le dijo: “… Yo soy, el que habla contigo” (Jn. 4:26). El demostró Su poder de a través del Don de Ciencia y discernimiento profético mencionandole detalles personales en cuanto a la vida de ella que solamente alguien que tuviera percepción divina podría haber sabido. Azorada: que significa; Hacer perder la serenidad a una persona, la samaritana dejó su cántaro y se apresuró a contar a otros su encuentro con el Señor, diciendo: “Venid, ved a un hombre que me ha dicho todo cuanto he hecho. ¿No será este el Cristo?” (Jn. 4:29). Mientras ella iba por la ciudad contando lo ocurrido, Jesús les enseñó a los Apóstoles, que habían regresado, que El ya tenía “una comida que comer, que vosotros no sabéis” (Jn. 4:32). Los discípulos, que llevaban la comida que habían conseguido, quedaron extrañados y el Maestro les explicó: “Mi comida es que haga la voluntad del que me envió, y que acabe su obra” (Jn. 4:34).
Cuando llegó la multitud de samaritanos curiosos para ver y oír al hombre que proclamaba ser el Mesías “le rogaron que se quedase con ellos; y se quedó allí dos días” (Jn. 4:40). Las Escrituras afirman que muchos creyeron las enseñanzas del Salvador. Al oír, su curiosidad inicial se convirtió mas tarde en testimonio, y declararon: “… porque nosotros mismos hemos oído, y sabemos que verdaderamente este es el Salvador del mundo, el Cristo” (Jn. 4:42).
Subdivisión
Sabía usted: Que los Cristianos somos como la Sal, --Si como la Sal, Ya que la Sal produce
Sed, Y nosotros como Sal debemos producir Sed a los demás, ¡Pero Sed de Jesús!, Mateo cap. 5 verso 13, dice: "Vosotros sois la sal de la tierra."
¿Que está haciendo usted para
provocar en otras personas ¿"Sed hacia Jesús"?
Amos cap. 8 verso 11, dice: "He aquí vienen días,
dice Jehová el Señor, en los cuales enviaré hambre a la tierra, no hambre de
pan, ni sed de agua, "sino de oír la palabra de Jehová"
¿Porque Sed de Jesús? Porque
Jesús es el Agua de Vida
Juan cap. 7 verso 37, "En el último y gran
día de la fiesta, Jesús se puso en pie y alzó la voz, diciendo: Si alguno tiene
sed, venga a mí y beba."
Juan cap. 4 verso 13, Mas el que bebiere
del agua que yo le daré, no tendrá sed jamás; sino que el agua que yo le daré
será en él una fuente de agua que salte para vida eterna."
Conclusión
Nosotros como hijos de la luz debemos producir
esa Sed, esa búsqueda, pero Solo lo podemos lograr con la ayuda del Espíritu
Santo, Sin Él No podemos Realizar Nada.
“A través de la historia, el hombre ha buscado siempre el camino mas fácil. Algunos han dedicado su vida a la búsqueda de la ‘fuente de la juventud’, un agua milagrosa que les brindaría vida eterna. Hoy día. muchos continúan buscando … alguna fuente mágica que les traiga el éxito, la satisfacción y la felicidad. Pero la mayor parte de su búsqueda es en vano … Únicamente esta ‘agua viviente’, que es el Evangelio de Jesucristo, puede brindar una vida feliz, de éxito y eterna a los hijos de los hombres”
En estos últimos días son tiempos de gran sed espiritual. Hay muchas personas en el mundo que buscan intensamente una fuente refrescante que pueda satisfacer su anhelo de encontrar significado y dirección en su vida; ansían una fresca y satisfactoria bebida de percepción y conocimiento que de alivio a su alma sedienta; su espíritu implora experiencias de paz y tranquilidad para nutrir y vivificar sus corazones marchitos.
Es cierto que “todavía hay muchas almas en la tierra que pertenecen a nuestro Dios, entre todas las sectas, partidos y denominaciones, los cuales fueron Inoculados con el Veneno de la Apostasía y fueron cegados por la sutil astucia de Satanás y hombres que acechan para engañar con sus heréticas doctrinas basadas en Dogmas, que no les muestran la verdad. Y ellos por su negligencia e ineptitud no son diligentes para indagar donde hallarla” "A ti alcé mis ojos, A ti que habitas en los cielos. He aquí, como los ojos de los siervos miran a la mano de sus señores, Y como los ojos de la sierva a la mano de su señora, Así nuestros ojos miran a Jehová nuestro Dios, Hasta que tenga misericordia de nosotros. Ten misericordia de nosotros, oh Jehová, ten misericordia de nosotros, Porque estamos muy hastiados de menosprecio. Hastiada está nuestra alma Del escarnio de los que están en holgura, Y del menosprecio de los soberbios." (Sal. 123:12). Esforcémonos con todo nuestro corazón, alma, mente y fuerza por demostrar a nuestros hermanos sedientos en dónde pueden encontrar el agua viva del evangelio, a fin de que puedan beber de esa agua que salta “para vida eterna” (Jn 4: 14).
Mi pueblo … me dejaron a mi, fuente de agua viva, y cavaron … cisternas rotas que no retienen agua.” (Jer. 2:13).
Clamemos a esos hombres y mujeres a voz en cuello que están atrapados en las sectas satánicas y las diferentes denominaciones apostatas lo que esta escrito en el libro de Apocalipsis cap. 18 verso 5, "Y oí otra voz del cielo, que decía: Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis partícipes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas."
En el ultimo día de la fiesta de los tabernáculos, el Salvador, que había regresado a Jerusalén, extendió esta invitación universal y eterna “Si alguno tiene sed, venga a mi y beba” (Jn. 7:37).
